Pensamientos y sentimientos
Por: Marcia Fragoso
Y noviembre nos llegó y con él la nostalgia
de los que ya no están y el recuerdo de
nuestra propia fragilidad.
Disfruten ésta época mágica
besos
Estaba la parca buscando
su siguiente victima mortal
cuando de pronto decidió
a la Nelson Vargas regresar.
El año pasado fue un fracaso, pensó
pero he estado entrenando
voy a correr y a andar en bici
y de a poco me los llevaré
Entonces se puso en camino
a Lindavista muy contenta
pues pensaba en el momento
en que a alguien se había de llevar.
Llegó en diferente horario
y se dijo ¿Qué mas da?
al fin que están abiertos
desde las cinco hasta las diez.
Lo que nunca se esperó
fue a un montón de chamacos
que entrenaban tae kwon do
y de domi la agarraron.
Condenados traviesillos -se dijo
hoy en día ya no hay respeto
con golpes aquí, moretones allá
quedó toda adolorida.
Voy a esperar se dijo
cuando vio que las niñas de ballet llegaban
esbozo una gran sonrisa
ahora sí, satisfecha dijo, no se me van a escapar.
Lo que no consideró
es que las niñas de ahora
ya no le temen a nada
y junto con Pati, la profesora
tremenda tunda le acomodaron.
¡Ay pobrecita La Parca!
grande fue su desventura
y no se había llevado ni un alma
y la noche se acercaba.
Se dijo, voy a la alberca
al fin que nadar ya sé
voy a atraparlos mientras nadan
y ni cuenta se van a dar.
Estaba el maestro Mike dando clase
se dirigió a ella y le dijo: para calentar
haz diez y seis veinticincos de crawl
y la Parca presurosa nado.
Sentía que el corazón, del pecho se le salía
y sin aliento ya estaba
así que salió de la alberca
antes que la clase terminara.
¡Maldición! ¿Y ahora qué?
ni un muertito me he llevado
triste y desesperada
al gimnasio se dirigió.
El maestro Armando al verla
la puso en la caminadora
para fortalecer las piernas y hacer algo de cardio
con colinas onduladas.
La inclinación subía y bajaba
y a la pobre Parca, sus piernitas ya le dolían
¡Estoy exhausta! Entonces se dijo
¿Cómo aguantan todos los dias?
Ya mejor me voy de aquí
no vaya ser que el maestro Mario
me quiera poner a bailar
y de una vez acabe
con lo que me queda de aliento.
Mejor vengo el año que viene
pues ¡Total! El tiempo es eterno
les daré otra oportunidad
y espero que la aprovechen.
Y sin más la Parca se fue
a un hospital cercano fue a parar
ahí se llevó a unos cuantos
que ansiaban el descanso eterno.
Y feliz de su labor
contenta se despidió
de México y de los deportistas
a los que ya tenía en estima.
Marcia
27 de octubre 2024
Bueeeeenas noches mis querides lectores, les saludo desde mi rincón favorito para escribir en esta nochecita fresca de otoño, después de un día de hacer pendientes en casa, ya saben cómo es esto, el quehacer nunca termina.
En fin que se acerca el día de los muertos en nuestro México lindo y querido y con el una de las festividades más nostálgicas del año.
En mi casa somos pocos de familia y hay por mucho, más muertos que vivos, conforme voy pensando en todos ellos vienen a mi mente recuerdos de tiempos tal vez mejores, tal vez peores, simplemente otros tiempos.
Todos pensamos que México era mejor cuando éramos jóvenes, en lo personal pienso que la vida era más fácil, antes con menos hacíamos más.
Bueno, pero no me voy a desviar el tema, el hecho es que el recordar a los que ya se fueron nos pone en presencia de la muerte misma, por naturaleza tenemos miedo a morir, sobre todo a la manera en que nuestra muerte se manifieste, el hecho de pensar en los que ya se fueron nos trae a la mente la manera como se fueron, una vez mi mamá dijo: ¡yo no quería terminar así! Y esto nos trae la idea a la mente ¿Cómo quisiera yo terminar la vida? ¿Puedo hacer algo diferente para tener el mejor final posible? Tal vez sí tal vez no, nadie lo sabe y de ahí el gran respeto que sentimos por nuestra amiga la muerte.
Todos dejaríamos ser independientes al llegar a viejos y un día cualquiera dormir calientitos en nuestra cama, así nada más, sin mayor despedida que un coloquial hasta mañana.
Pero todos sabemos que muy pocos son los elegidos para este tipo de muerte y conforme nos vamos acercando al momento dejamos de pensar en la muerte que sea como sea, llegará y empezamos a disfrutar de la vida y sacarle el mayor provecho posible, o tal vez nos volvamos unos viejitos amargados, de cualquier forma el modo en que pasemos nuestros últimos años es decisión de cada quien, cuando nos toca, nos toca.
Mientras ponemos la ofrenda, el momento se presta para recordar a los que ya se fueron, su vida, obra y milagros, como por ahí se dice y vienen a nuestra mente y a nuestro corazón esos momentos que disfrutamos a su lado, la mayoría de las veces cuando ya nos resignamos a que ya no estén aquí los recordamos con cariño y con una sonrisa y valoramos y agradecemos por nuestra propia vida.
Es momento de poner la ofrenda, de recordar sus platillos favoritos, sus juguetes favoritos en el caso de los niños, de cantarles, ya sea en nuestra mente o a todo pulmón y tal vez de visitarlos en el panteón, el primero y dos de noviembre son noches mágicas y de tradición en las que con nuestro pensamiento y nuestro cariño damos vida a los que ya no están aquí.
Recordando nuestra muerte recordamos nuestra propia fragilidad en esta vida y disfrutamos de las diversas representaciones que los artistas hacen de la muerte, nuestra amiga, nuestra guía.
Deseo que en este día de muertos que viene, haya algo de la tradición en su casa y en sus corazones y que recordemos con cariño a los que ya se fueron, que valoremos nuestro regalo aún existente de la vida misma.
Eso es todo por hoy mis querides lectores, los espero la semana que viene con otra historia que nos haga pensar y sentir y que sean felices todos los días como unas frágiles y finitas lombrices.
Con amor
Marcia
27 de octubre 2024